¿Son aptos los niños y adolescentes asmáticos para los ejercicios anaeróbicos?
Los ejercicios anaeróbicos son aquellos en los que se aplica una intensidad elevada durante un período de tiempo corto, como puede ser el levantar pesas, carreras cortas a máxima velocidad y demás altamente demandantes a nivel de energía que se realicen por un tiempo corto.
Este tipo de actividad física tiene múltiples beneficios, especialmente a nivel musculoesquelético, no obstante, hay una parte de la población que se plantea la siguiente pregunta, soy asmático/a ¿puedo hacer ejercicios anaeróbicos?
La actividad física en niños y adolescentes asmáticos es vital para mejorar su calidad, pero estos beneficios se asocian con los ejercicios aeróbicos, pero ¿qué sucede con los ejercicios anaeróbicos?
Todo esto lo comentaremos en este artículo, así que continúa leyendo este artículo, y es que no sólo hablaremos sobre el entrenamiento anaeróbico y su relación con el asma, sino que también te ayudaremos con algunos conceptos para mejorar tu calidad de vida. ¡Empecemos!
¿Qué es el asma?
El asma es un padecimiento donde las vías respiratorias se inflaman y estrechan, lo que genera mayor dificultad para respirar debido a la mucosidad generada, además de provocar tos constante.
En esta afección hay dos grupos de personas, por un lado están quienes el asma es un inconveniente menor, pero, por el otro lado están quienes el asma les representan una dificultad de tener una vida normal, donde incluso su vida puede estar en riesgo.
Cura como tal no existe para el asma, pero, si que hay tratamientos efectivos y la inclusión de hábitos para mejorar el estilo de vida para tener un control de los síntomas.
Síntomas
El asma es una afección que ataca de manera diferente en cada persona, pues los síntomas pueden estar presentes en todo momento o, aparecer de manera repentina durante el ejercicio y demás situaciones.
De igual manera, los síntomas comunes del asma son:
- Falta de aire.
- Dolor o sensación de opresión en el pecho.
- Silbidos al exhalar.
- Problemas para conciliar el sueño.
- Tos, la cual en caso de una gripe o resfriado empeora.
Signos de empeoramiento del asma
- Dificultad creciente al momento de respirar.
- Cuando se necesita el uso de un inhalador de manera frecuente para aliviar.
¿Cuándo es necesario consultar con un médico?
Dependiendo de tu caso puede o no ser necesario consultar al médico con frecuencia, sin embargo, hay algunas situaciones en concreto que pueden requerir la asistencia a un médico tratante, las cuales son:
Acude a un médico urgentemente cuando:
Obviamente la asistencia urgente a un médico debe estar presente cuando la vida corre riesgo por culpa de un ataque, y para ello existen algunos síntomas que te pueden ayudar a determinar si esto es necesario:
- Rápido empeoro de la dificultad para respirar, así como una mayor frecuencia de la sibilancia.
- Cuando el uso de un inhalador es necesario con una mayor frecuencia.
- Cuando hay falta de oxígeno ante la realización de una actividad mínima.
Debes ver al médico siempre que:
- En caso que se presenten algunos síntomas del asma si ser diagnosticado con esta afección es necesario acudir al médico, pues a mayor rapidez se detecte mejor será el control de la misma en el corto y mediano plazo, pues así se tendrá una mejor calidad de vida.
- Para mantener un control del asma después de haber recibido el diagnóstico, pues hay que asistir de manera periódica para ver como está funcionando el tratamiento, si es efectivo o es necesario hacer un cambio.
- En caso de que los síntomas empeoren obviamente es necesaria la visita al médico, y esto lo puedes comprobar en caso que se presenten algunos de los escenarios mencionados anteriormente.
- Antes de consumir algún medicamento es necesaria la consulta con el médico, pues en ningún caso está recomendada la automedicación, ya que en muchos casos pueden surgir efectos que pueden incluso empeorar los síntomas de la enfermedad.
- Este último punto es obligatorio, pues la visita al médico debe ser frecuente para revisar el funcionamiento del tratamiento, ya que el asma es una afección que puede variar en el tiempo, por lo que una visita al médico va a determinar si se requiere algún cambio.
Causantes del asma
Al día de hoy no está claro realmente que provoca que una persona se vuelva asmática, sin embargo, si que existen posibles conclusiones al respecto, siendo la más aceptada la combinación de factores hereditarios y ambientales.
Asimismo, a continuación comentamos algunos aspectos que pueden desencadenar esta afección, como lo son:
Desencadenantes del asma:
La exposición constante a diferentes irritantes y/o sustancias que provocan alergias y por ende, desencadenar los síntomas propios del asma es la razón por la que muchas personas pueden contraer esta afección.
En ese sentido, sus desencadenantes pueden cambiar según la persona, pero en la mayoría de casos son los siguientes:
- Los alérgenos transportados en el aire como el polen, las esporas de moho, los ácaros del polvo o partículas de insectos por ejemplo.
- Infecciones respiratorias, como puede un resfriado común.
- La realización de la actividad física en presencia de aire frío.
- Agentes contaminantes del aire, como puede ser el humo de los carros.
- Escenarios continuados con emociones fuertes, como puede ser el estrés excesivo.
- Conservantes o sulfitos añadidos sobre algunas clases de alimentos y bebidas, como pueden ser los camarones, la cerveza, papas procesadas o incluso el vino.
- La enfermedad por el reflujo gastroesofágico puede ser un causante, ya que se caracteriza por la acumulación de gases estomacales sobre la garganta.
Factores de riesgo
Si bien no son el desencadenante en sí, se tiene la creencia que algunos factores pueden incrementar en una persona las posibilidades de que se vuelva asmática, como pueden ser:
- Tener un familiar consanguíneo que sea asmático, como puede ser el caso de un hermano o un padre.
- Tener otro tipo de afección alérgica que genere picazón o enrojecimiento en la piel, así como congestión nasal, goteo de mucosidad nasal o picazón en los ojos.
- El sobrepeso y malos hábitos de vida, como una mala alimentación o ser fumador.
- Estar en contacto constante con otros fumadores mientras fuman.
- Exponerse a gases tóxicos y demás agentes contaminantes del aire.
- Exposición constante a sustancias químicas usadas en el ámbito industrial, como fertilizantes o ácidos.
Análisis de la evidencia científica sobre el entrenamiento anaeróbico y el asma
Lamentablemente el tema del entrenamiento anaeróbico sobre los niños y adolescentes que padecen asma no cuenta con la atención que se merece, lo que hace que sean pocos los estudios al respecto de la relación de este tipo de ejercicios y el asma, pero igualmente la evidencia que existe en torno al tema es positiva.
Del mismo modo, existe otra gran limitación, y es que sumado a la poca evidencia que existe al respecto, tampoco hay evidencia que analice de los efectos aislados en este contexto por parte del ejercicio anaeróbico, pues todos lo estudios realizados están enfocados en relación al aptitud de los participantes en los ejercicios aeróbicos.
Esto lo que hace es que los beneficios del ejercicio físico en personas asmáticas estén orientados al ejercicio aeróbico en conjunto al anaeróbico, además, esto se acompaña de una metodología no optimizada en ese sentido, pues son técnicas y estrategias que al día de hoy están descontinuados.
Sin embargo, aún con todos esos aspectos en contra, el ejercicio anaeróbico se recomienda en niños y adolescentes asmáticos siempre que exista un control y se atiendan a ciertos criterios específicos para cada individuo, como ya lo comentaré en el siguiente punto:
Controles a tener en cuenta:
Mantener un monitoreo de la persona mientras está desempeñando este tipo de actividad física es importante para mantener su bienestar. Vale aclarar que dicho control se basa en el control de los signos vitales de la persona, los cuales nos ayudarán a medir que intensidad se está aplicando.
En ese sentido, los controles a realizar de estos ejercicios físicos deben llevarse a cabo previa y posteriormente a la sesión de entrenamiento. Asimismo, la recomendación es que la ejecución de dichos controles sea realizado de la siguiente manera:
- Realizar una toma de la frecuencia cardíaca y la presión arterial previo al inicio de la sesión de entrenamiento.
- Tomar la frecuencia cardíaca después de finalizar el primer tramo del entrenamiento.
- Tomar la frecuencia cardíaca inmediatamente al finalizar la sesión de entrenamiento.
- Una vez pasados cinco minutos de finalizar la sesión se debe realizar otra toma de la frecuencia cardíaca.
Beneficios de los ejercicios anaeróbicos
Ya comentaba que los beneficios de la actividad física en personas asmáticas estaba orientado a los ejercicios aeróbicos, actividades como trotar o nadar, pero ¿qué sucede con ejercicios de alta intensidad? La verdad es que los ejercicios anaeróbicos en personas asmáticas también tiene sus beneficios, los cuales tocamos a continuación:
- Desarrollo en la masa muscular, lo que previene lesiones musculares al realizar otro tipo de actividades físicas.
- Aunque este punto va en conjunto a los ejercicios aeróbicos, la verdad es que la actividad física anaeróbica mejora la capacidad de lidiar con la fatiga.
- Es un tipo de actividad muy buena para mejorar la capacidad cardiorrespiratoria en conjunto a los ejercicios aeróbicos.
- Ayuda a mantener un control del peso corporal, lo que resulta muy beneficioso con respecto al asma.
Consejos de cara a realizar una actividad física anaeróbica
Los ejercicios anaeróbicos en una población asmática reportan grandes beneficios, pero, siempre es importante implementar algunas recomendaciones con tal de prevenir riesgos y fomentar el bienestar, es por ello que te invito a considerar los siguientes consejos:
- Al igual que en personas sin asma, cuando se inicia en este tipo de actividad física resulta fundamental empezar muy suave, es decir, todo de manera progresiva, de forma que el cuerpo se adapte y no represente un impacto dañino.
- Este punto está relacionado con el anterior y es que el entrenamiento deberá estar individualizado en todos los sentidos, por lo que resulta fundamental contar con la ayuda de un entrenador.
- Es necesario que ante la presencia de algún tipo de molestia se pare la sesión de entrenamiento.
- Este último criterio es imprescindible, y es que antes de realizar cualquier tipo de actividad se debe consultar con el médico tratante, de manera que te indique algunos aspectos a evitar y como preservar tu bienestar.
Conclusiones
Como hemos visto hasta ahora, el ejercicio anaeróbico puede ser bien tolerado por parte de niños y adolescentes con asma, pues se ha comprobado que este tipo de actividad física no supone un riesgo en la salud de los individuos, al contrario, aporta muchos beneficios a nivel de salud y para optimizar el tratamiento de este padecimiento.
Si bien es cierto que la población de niños y adolescentes asmáticos pueden tener una capacidad menor ante la actividad anaeróbica en comparación a un grupo sano, si se realiza una adecuada adaptación al nivel de cada persona y progresión de cargas, no existirá riesgo alguno en la salud, pero claro, como ya comentaba en el punto anterior, es importante que esté llevado de la mano de un entrenador y la supervisión médica necesaria.
Con la ejecución de estos ejercicios se he demostrado como los niños y adolescentes pueden optimizar el tratamiento que están llevando, pues mejora aspectos de la salud que en un mal estado potencian el asma.
Por esta razón es que al día de hoy se está realizando la prescripción del ejercicio anaeróbico como vía de tratamiento para este padecimiento.
A ver, la población de personas asmáticas pueden trabajar y tener un buen rendimiento en actividades de alto umbral, recordemos que la actividad aeróbica también es muy demandante a nivel respiratoria y tiene muchos beneficios en ese sentido.
Obviamente aún existe la necesidad de seguir investigando al respecto, realizar estudios en un contexto ideal para lograr sacar conclusiones en ese sentido, pero lo que se sabe en la actualidad es que la actividad física más allá de ser negativa en niños y adolescentes asmáticos genera muchos beneficios que incluso complementan el tratamiento del asma, eso sí, debe existir un correcto seguimiento y planificación de la carga de trabajo.
Tabla de contenidos